Los problemas que nos podemos encontrar en esta etapa son muy claros: es un período donde el adolescente es muy influyente por eso las compañías son cruciales. Es importante que comprendan los cambios de su físico y que acepten que no son como esperan; la comparación con los demás cobra sentido al ser tan importante para ellos la pertenencia al
grupo. Por ello, timidez, bajas habilidades sociales, bulling pueden dejar tantas secuelas en la personalidad, porque está dando en el punto crucial del su crecimiento, la amistad.
En esta etapa los padres nos planteamos infinidad de preguntas: ¿Es tan grave como lo pintan?, ¿Nos supone a nosotros un desgaste tan grande?, ¿Realmente me necesita? En la adolescencia los chicos dan imagen de seguridad porque necesitan continuamente reafirmar su identidad pero desde dentro hay una tormenta de emociones que se alejan de esta
seguridad aparente. Ya no funciona la obediencia y el castigo; aquí nos hemos de convertir unos expertos en el arte de negociar.
La adolescencia periodo delicado en el que se desprende el equipaje de niño para alcanzar el del adulto. Es la etapa más revolucionaria a nivel emocional, físico, y social de toda la vida. El cuerpo se llega a desproporcionar, la euforia y rabia se alternan y la referencia de los amigos se percibe como lo más importante; iniciación de contactos con el otro sexo. Aunque sea la época menos manifiesta de que se necesita a los padres, como siempre han de estar ahí,atentos.